Instagram es una plataforma ideal para mostrar a nuestros potenciales clientes por qué hacemos lo que hacemos, o lo que es lo mismo, por qué queremos que adquieran nuestros productos o servicios.

Nos ofrece los elementos necesarios para crear potentes storytellings, dándonos la oportunidad de fidelizar a los clientes incluso aunque no hayan realizado ninguna compra. Si eres capaz de contar una historia atractiva, acompañada de un texto (teniendo en cuenta el límite de caracteres de Instagram) y de una imagen o vídeo que apoye y aumente el componente narrativo, triunfarás en Instagram.

Busca ese painstorm,  resuélvelo y después vendes .
daniel fela

Cómo lograr que te vean en Instagram

No es ningún secreto que el algoritmo de Instagram ha afectado a la visibilidad del contenido de las marcas en el feed de cada usuario. Por ese motivo, es más importante lograr crear una comunidad con seguidores fieles y comprometidos.

La visibilidad de las publicaciones en el feed va a depender de que los seguidores estén comprometidos con la marca, dejando comentarios y «Me gusta», mencionando a sus amigos y compartiendo los posts. El algoritmo de Instagram no da prioridad al contenido en una cuenta con un gran número de seguidores pero que no interactúan.

Por lo tanto, si dos cuentas consiguen el mismo nivel de interacciones, pero una de ellas tiene 300 seguidores y la otra 3000, es más probable que la cuenta con menos seguidores obtenga más visibilidad porque Instagram considerará que su contenido es más relevante.

Para conseguir los seguidores adecuados, lo idóneo es crear un perfil de tu buyer persona. Debes averiguar en qué parte de Instagram se encuentra tu cliente ideal y por qué, por ejemplo, investigando qué gustos tiene, a quiénes sigue e intentar saber por qué lo hace. Después tendrás que descubrir cómo atender a las personas que siguen tu cuenta. La creación de contenido con valor para tu target los mantendrá satisfechos y aumentará tu audiencia, incrementando también la participación de los seguidores actuales.

Es fundamental dedicar unos minutos cada día a echarle un vistazo a las últimas novedades de tu cuenta de Instagram. Ver quiénes son tus seguidores más recientes e incluso, dependiendo del perfil de la marca, dejar un comentario o “Me gusta” en alguna de sus fotos.

También es aconsejable navegar por los hashtags más populares que quizás no estén usando ni tú ni tus competidores e incluirlos en tu contenido. Si a través de esos hashtags los usuarios llegan hasta tu cuenta y ven que puedes ofrecer valor a sus vidas, negocios o cuentas de Instagram, lograrás que se conviertan en nuevos seguidores.

Cuentas de empresa versus cuentas personales en Instagram

Cuando Instagram creó los perfiles de empresa, se comentó que las publicaciones que no tuvieran una campaña asociada tenían menor alcance orgánico que en las cuentas personales. Sin embargo, el perfil de empresa ofrece la opción de lanzar anuncios, promocionar publicaciones, publicar links en las stories y conocer mejor a la audiencia a través de las estadísticas.

De igual manera, si usas un perfil personal, puedes lanzar campañas y ver sus resultados y estadísticas a través de Facebook Ads.

En todo caso, si notas que te beneficia más un tipo de perfil que otro, puedes revertirlo y pasar de una cuenta a otra sin problemas.

Crear un perfil que consiga ventas en Instagram

En un principio, los artículos o servicios con un precio alto suelen ser mucho más difíciles de vender en Instagram que los que tienen precios más asequibles. No obstante, cuanto más podamos guiar a los usuarios a lo largo del proceso de compra, mayor será la probabilidad de conseguir una venta.

Un grave error que suelen cometer los emprendedores cuando intentan vender en Instagram es no dejar claro quiénes son en el perfil de su cuenta. Deben indicar el valor que proporcionan o lo que están tratando de vender.

Se puede decir que, con tu perfil, básicamente tienes 15 segundos para indicarle a los usuarios de qué trata tu empresa y hacerles saber si se han visto reflejados o se han sentido escuchados. Aquí es donde comienza el proceso de venta en Instagram.

¡Las imágenes son fundamentales! Según algunos estudios, las fotos que mejor funcionan en Instagram son las que están iluminadas de forma natural y tienen un color con un tono distinto, llamativo, ya que los ojos se centran en un color específico que destaque o contraste con el fondo.

Las fotos oscuras, con demasiado texto o los collages no suelen funcionar bien, aunque todo dependerá de la temática.

Para comprobar qué imágenes te funcionan mejor, puedes consultar cuáles han conseguido mejores resultados (mayor número de “Me gusta”, comentarios y menciones) en un período de dos semanas. Una vez que sepas esta información, podrás crear imágenes que tengan ese mismo estilo.

Lo más recomendable es usar el mayor número de hashtags que nos permite Instagram, es decir, 30. Aunque también debes ser estratégico. Si, por ejemplo, muchos usuarios usan un hashtag popular, la probabilidad de que tu imagen consiga visibilidad es mínima.

Es aconsejable diversificar los hashtags para atraer a tu buyer persona. Por ejemplo, utilizar cinco hashtags populares, cinco que pertenezcan a tu región geográfica y hashtags que se relacionen directamente con tu negocio.

Respecto a la frecuencia con la que se debe publicar, depende realmente de lo que mejor funcione con tu público. Algunos Instagramers suelen publicar cuatro veces al día porque sus seguidores prácticamente lo exigen. Sin embargo, hay cierto contenido que podría llegar a sobrecargar de información a los usuarios y publicar una vez al día sería suficiente.

La mejor opción es combinar las publicaciones orgánicas con el lanzamiento de campañas para lograr mayor visibilidad. La proporción dependerá de la línea de productos y su precio. Para artículos baratos, una proporción que suele funcionar es la de lanzar un anuncio por cada tres posts.

La llamada a la acción

La mejor forma de vender en Instagram es por el valor que se ofrece. Que muestres cómo tu producto o servicio puede resolver un problema o facilitar la vida del usuario. Cuando creamos un anuncio en Instagram, la llamada a la acción no debe ser «compra mi producto o servicio», a pesar de que esa sea la finalidad del mismo.

Por ejemplo, si quisieras hacer una campaña del curso que impartes sobre “Cómo vender en Instagram”, lo más indicado sería optar por preguntarle a los usuarios si están intentando conseguir ventas a través de Instagram, si están cansados de no lograr visibilidad y les gustaría obtener más conversaciones. Tras estas cuestiones, ofrecerías tu curso como la solución para enfrentar los desafíos de Instagram.